Un hombre serbio avergonzado por su eyaculación precoz acudió a un curandero para que le recomendara un tratamiento ya que le daba vergüenza acudir a un médico tradicional.
El curandero le recetó tener sexo con un erizo y nuestro amigo ni corto ni perezoso llevó a cabo tamaña barbaridad con el resultado de destrozarse el pene :|
En fin, tengamos cuidado con nuestra "herramienta" y no tengamos sexo con cosas peligrosas :p
2 comentarios:
joderr... la peña está cada vez peor...:S
Diooooooooooooos que dolor!!!!
Publicar un comentario